El 22 de diciembre de 1987, hace exactamente 29 años, Luca Prodan fue encontrado sin vida en su casa de la calle Alsina al 451 en el barrio de San Telmo. El italiano que dio vida a uno de los grupos más influyentes del rock argentino, Sumo, había sufrido un paro cardíaco debido a una grave hemorragia interna causada por una cirrosis hepática.
Luca tenía tan solo 34 años cuando lo sorprendió la muerte, pero dejó un legado musical que llevó a su banda a pertenecer al mismo escalafón que Los Abuelos de la Nada, Almendra, Pescado Rabioso, Manal, La Renga, Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, Charly García, Serú Girán, Soda Stereo, Sueter y Virus.
Prodan nació en Italia en 1953 en el seno de una familia acaudalada. Sus padres habían llegado allí desde China, escapando de la Segunda Guerra Mundial. Si bien al momento del arribo a Europa no tenían mucho dinero, no tardaron en acomodarse económicamente ya que su padre era un talentoso hombre de negocios.
Luca estudió en el prestigioso colegio Gordonstoun, el mismo que educó al Príncipe Carlos de Inglaterra. Sn embargo, el inquieto y rebelde Luca estaba muy a disgusto en un colegio pupila, cuyas autoridades eran sumamente estructuradas y cuando estaba por graduarse se escapó. Primero se fue a Londres y después a su Roma natal.
“Me escapé cuando me di cuenta de que me estaban preparando para ser un pequeño sirviente de la sociedad. (...) Dejé una pista falsa como si me hubiera ido a Noruega en un pesquero, pero en realidad volví a Roma. Mis padres tenían detectives buscándome en Noruega y yo estaba a tres cuadras de su casa”.
Su madre lo vio en una esquina y Luca tuvo que abandonar la “libertad” adquirida. La recuperó luego, en un viaje a Inglaterra a principio de los '70. Allí vivió intensamente: se enamoró profundamente de Linda, protagonizó inolvidables aventuras con su amigo Timmy McKern y comenzó a drogarse con heroína.
Para fines de los '70 las vidas de Timmy y Luca eran completamente diferentes. El primero había viajado a la Argentina por la muerte de su padre, se había casado y había tenido dos hijas. El segundo había compuesto canciones y trabajaba en el sello discográfico Virgin, que por esos días editaba, por ejemplo, a los mismísimos Rolling Stones.
Pero la heroína se estaba apoderando de la vida de Luca. En el ’79 tuvo una sobredosis que le generó un coma hepático y estuvo internado sin muchas probabilidades de salir vivo del hospital. Se salvó pero estaba sumergido en un “mundo gris”, según dijo después.
En ese momento una foto lo iluminó. Era una imagen de Timmy junto a su mujer y sus niñas en Córdoba. Inmediatamente Luca supo que ese era su lugar en el mundo y principalmente su salvación a la heroína.
Cartas de por medio con Timmy, meses después Prodan se instaló en las sierras con proyectos musicales y personales.
Allí le presentaron al guitarrista Ricardo Curtet para empezar a diseñar lo que luego sería Sumo. Luca viajó a ondres a comprar insrumentos y convenció a su amiga Stephanie Nuttal de ser la baterista de su nueva banda. A principio de los '80 era una revolución en sí misma que una mujer estuviera a cargo de las baquetas de una agrupación.
Luego se les sumaron Germán Daffunchio (cuñado de Timmy) y Alejandro Sokol. Las condiciones se dieron perfectamente para que Sumo naciera en 1981 en Mina Clavero. Con el pasar de los años también integraron la banda Diego Arnedo en bajo, Roberto Pettinato en saxo y Ricardo Mollo en guitarra.
“Quiero dinero”, “La rubia tarada”, “Mejor no hablar (de ciertas cosas)”, “Llegando los monos”, “Los viejos vinagres”, “Crua chan”, “No tan distintos” y “Banderitas y globos” son solo algunos de los éxitos del rock que le debemos a Sumo.
El último recital de Luca fue en el estadio del Club Atlético Los Andes el 20 de diciembre de 1987. Sus ex compañeros recordaron más tarde que esa noche, momentos antes de interpretar una poderosa versión de Fuck you, Luca dijo: "ahí va la última" y efectivamente, fue la última.
El 22 de diciembre de 1987, hace exactamente 29 años, Luca Prodan fue encontrado sin vida en su casa de la calle Alsina al 451 en el barrio de San Telmo. El italiano que dio vida a uno de los grupos más influyentes del rock argentino, Sumo, había sufrido un paro cardíaco debido a una grave hemorragia interna causada por una cirrosis hepática.

Luca tenía tan solo 34 años cuando lo sorprendió la muerte, pero dejó un legado musical que llevó a su banda a pertenecer al mismo escalafón que Los Abuelos de la Nada, Almendra, Pescado Rabioso, Manal, La Renga, Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, Charly García, Serú Girán, Soda Stereo, Sueter y Virus.

Prodan nació en Italia en 1953 en el seno de una familia acaudalada. Sus padres habían llegado allí desde China, escapando de la Segunda Guerra Mundial. Si bien al momento del arribo a Europa no tenían mucho dinero, no tardaron en acomodarse económicamente ya que su padre era un talentoso hombre de negocios.

Luca estudió en el prestigioso colegio Gordonstoun, el mismo que educó al príncipe Carlos de Inglaterra. Sn embargo, el inquieto y rebelde Luca estaba muy a disgusto en un colegio pupila, cuyas autoridades eran sumamente estructuradas y cuando estaba por graduarse se escapó. Primero se fue a Londres y después a su Roma natal.

“Me escapé cuando me di cuenta de que me estaban preparando para ser un pequeño sirviente de la sociedad. Dejé una pista falsa como si me hubiera ido a Noruega en un pesquero, pero en realidad volví a Roma. Mis padres tenían detectives buscándome en Noruega y yo estaba a tres cuadras de su casa”.

Su madre lo vio en una esquina y Luca tuvo que abandonar la “libertad” adquirida. La recuperó luego, en un viaje a Inglaterra a principio de los '70. Allí vivió intensamente: se enamoró profundamente de Linda, protagonizó inolvidables aventuras con su amigo Timmy McKern y comenzó a drogarse con heroína.

Para fines de los '70 las vidas de Timmy y Luca eran completamente diferentes. El primero había viajado a la Argentina por la muerte de su padre, se había casado y había tenido dos hijas. El segundo había compuesto canciones y trabajaba en el sello discográfico Virgin, que por esos días editaba, por ejemplo, a los mismísimos Rolling Stones.

Pero la heroína se estaba apoderando de la vida de Luca. En el ’79 tuvo una sobredosis que le generó un coma hepático y estuvo internado sin muchas probabilidades de salir vivo del hospital. Se salvó pero estaba sumergido en un “mundo gris”, según dijo después.

En ese momento una foto lo iluminó. Era una imagen de Timmy junto a su mujer y sus niñas en Córdoba. Inmediatamente Luca supo que ese era su lugar en el mundo y principalmente su salvación a la heroína.

Cartas de por medio con Timmy, meses después Prodan se instaló en las sierras con proyectos musicales y personales.

Allí le presentaron al guitarrista Ricardo Curtet para empezar a diseñar lo que luego sería Sumo. Luca viajó a ondres a comprar insrumentos y convenció a su amiga Stephanie Nuttal de ser la baterista de su nueva banda. A principio de los '80 era una revolución en sí misma que una mujer estuviera a cargo de las baquetas de una agrupación.

Luego se les sumaron Germán Daffunchio (cuñado de Timmy) y Alejandro Sokol. Las condiciones se dieron perfectamente para que Sumo naciera en 1981 en Mina Clavero. Con el pasar de los años también integraron la banda Diego Arnedo en bajo, Roberto Pettinato en saxo y Ricardo Mollo en guitarra.

“Quiero dinero”, “La rubia tarada”, “Mejor no hablar (de ciertas cosas)”, “Llegando los monos”, “Los viejos vinagres”, “Crua chan”, “No tan distintos” y “Banderitas y globos” son solo algunos de los éxitos del rock que le debemos a Sumo.

El último recital de Luca fue en el estadio del Club Atlético Los Andes, de Buenos Aires, el 20 de diciembre de 1987. Sus ex compañeros recordaron más tarde que esa noche, momentos antes de interpretar una poderosa versión de Fuck you, Luca dijo: "ahí va la última" y efectivamente, fue la última.